Con su mano derecha en alto, Rafael Correa juró cumplir y hacer cumplir las leyes y la Constitución ecuatorianas cuando, a las 12:00 de ayer, inició su segundo período presidencial, luego de haber ganado en primera vuelta la elección del último 26 de abril.

En su discurso agradeció a su familia y a su gabinete ministerial por el respaldo que le brindaron en sus dos primeros años de gestión. Y para su esposa e hijos, una promesa: “En estos años he estado ausente; las cosas van a cambiar. Sé que el pueblo lo comprenderá”.

Los logros de la ‘revolución ciudadana’ fueron el eje de las palabras que Correa dirigió a la nación. No hubo más juramento que el de nunca traicionar a los ecuatorianos y tampoco planes futuros para la administración más allá de la ya anunciada radicalización de su forma de gobierno.

	Discurso de Rafael Correa / pdf (378.72 KB) Presidente pide establecer formas de control a prensa El respaldo se volcó a las afueras de la Asamblea

El Jefe de Estado resumió los dos últimos años en cinco ejes. Primero habló sobre la ‘revolución constitucional’ gracias a la cual, dijo, “éste es un nuevo tiempo en el que vamos a mantener vivo lo alcanzado”, refiriéndose a la Carta Magna aprobada en Montecristi en el 2008.

“Lucha contra la corrupción”
Éste fue el segundo eje mencionado por Correa en el cual recordó que “el único caso de corrupción en las altas esferas fue denunciado por nosotros mismos (los hechos acerca del Ministerio del Deporte)”.

“Revolución económica”
Destacó la expulsión del representante del Banco Mundial en Ecuador como muestra del rechazo a las “burocracias internacionales” que, expresó, pretenden imponer chantajes. “De dignidad también viven los pueblos”, advirtió.

Asimismo rescató la terminación de la tercerización laboral, el alza de sueldos para los maestros, la seguridad social para las empleadas domésticas, la reducción de las tarifas de los servicios públicos, la gratuidad de la educación y el congelamiento del costo de los combustibles.

Pero, entre todo ello, manifestó que en la radicalización de la revolución ciudadana “superaremos el mezquino concepto de los salarios mínimos mal entendidos como salarios justos. Ninguna empresa se considerará rentable hasta que consiga para sus trabajadores el salario verdaderamente digno”.

“Revolución social”
De las mil 221 personas que lograron la amnistía en la Asamblea Constituyente por tenencia de drogas “sólo tenemos 19 reincidencias”, aseguró el Primer Mandatario para describir los logros de las políticas sociales que, apuntó, no sólo se limitan a la rehabilitación carcelaria, sino que se notan en los planes de vivienda, de educación, salud y en el Plan Retorno para los migrantes.

“Rescate de la soberanía”
En este eje Correa volvió a arremeter contra el Gobierno colombiano pues dijo que él no ha olvidado “los siete años de fumigaciones con glifosato, el bombardeo del 1 de marzo de 2008, las decenas de millones que gastamos en cuidar la frontera, los miles de desplazados colombianos que acoge Ecuador… No esperamos las palmas pero tampoco tanta ingratitud”, acotó.

En este marco también se refirió a la “arremetida mediática para hacernos pasar por hostiles con Colombia”. Y agregó que “si mañana aceptara bases militares en nuestro país, pasaría de ser el amigo de las FARC al estadista amigo de todos”.
Palabras finales

Cordero se refirió a su amigo
El Presidente del Parlamento, Fernando Cordero, aprovechó la ocasión para hacer un recorrido por el trabajo de la Asamblea Constituyente, la Comisión Legislativa y la actual Asamblea Nacional. En sus palabras reconoció que, al menos, hasta el 14 de octubre el Legislativo se manejará con plazos apretados pues debe aprobar ocho leyes.

Asimismo se refirió a Rafael Correa como el “amigo y compañero” que fue declarado el conductor de la “gran minga nacional por el cambio”. “Señor presidente, el Ecuador cuenta con usted”, le dijo al culminar su intervención.